Ya hemos pasado la mitad de las fiestas y no todo ha sido feliz, es que todos los años tenemos algún disgusto. Ayer estuve en Madrid con Mario y con una amiga que llevó a sus niños y fuimos en tren. Después de pasar la mañana, los niños quisieron ir a comer al burguer, asi que allí fuimos y cuando terminaron de comer se fueron a la zona de juegos. Al rato viene el niño de mi amiga gritando que Mario se ha dado un golpe en la cabeza y que está llorando mucho. Fuí corriendo a verle y casi me desmayo cuando le veo tirado en el suelo todo cubierto de sangre y un agujero muy profundo en el entrecejo. Llamamos a una ambulancia y nos llevaron al hospital. Despues de la cura, la cosa no fué muy importante pero el susto no nos lo quita nadie. 
Le han cosido el agujerito y Mario le va contando a todos sus amiguitos que ha montado en ambulancia con sirena y todo. Para él ahora todo es una aventura pero ayer lo pasamos los dos fatal.Mario con el disfraz de Superman que le trajó Papá Noel.
